viernes, 12 de junio de 2009

De festejos y de amores...

















Voy retrasada en los escritos y en las felicitaciones, más dejar pasar de lado tu aniversario me seria imperdonable a ti que llevas tanto tiempo en vida, a ti que nos hemos separdo tantas veces y que nos reencontramos de nueva cuenta...

Se quedaron paralizadas las palabras que esperaron horas aturdidas
en la comisura de nuestras bocas deseosas.
Nos relamimos mutuamente las heridas
y volvimos a desfallecer sin tan siquiera hablar.

Saturamos el cielo de desatinos que nos golpearon cada noche antes de aproximarnos a todas las estrellas que pusimos nombre,
mientras tu voz, que un día fue mi guía, perdía ímpetu en la mía.

Dejándonos seducir por todas las calles que la vida prodigaba bajo nuestros pies, no percibimos, de antemano, que andábamos buscando lícitamente las que terminaban por congregarnos,
que andábamos buscándonos, sin más,
por todas aquellas que nos dejaban atrapados sin salida.

A ti y a mí…

Parece que se acercan días de vino y rosas.
Comienzo a vislumbrar el sol. La vida me lanza un guiño y me aferro a él con fuerza sin intención de soltarlo.
Los mejores momentos están por llegar, como dijiste aquel día, y ahora me alcanzan sin mas y me rozan una piel extasiada por tanto acontecimiento eminente y tangible.
Los contemplo, y no puedo más que sonreír, cada cual está donde merece estar, y tú has elegido permanecer a mi lado para verlos venir y poder celebrarlos conmigo, por todo lo alto…
Por cierto Feliz cumple...

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