Un novato al que señalan como un
candidato prometedor,
Llega apurado porque sabe que lo
espero ansiosa...
en el umbral de la puerta, con los
bolsillos llenos de esperanza y la mirada clavada en
la ilusión.
Sé que no trae garantías ni avales
pero hay algo en él que me hace
creer que es el indicado,
el que irá a cumplir esos mis propios
pactos internos,
el que renovará los plazos para esos
cambios postergados
y el que me indultará por los 12
meses transcurridos
sin gloria (pero con pena). Ja!!
El nuevo tiene el vigor propio de la
juventud,
el ímpetu intacto y el deseo sin
corromper.
Considera que es capaz de destruir la
monotonía de los lunes
e incrementar la alegría de los
viernes.
Insinúa que habrá pocos bancos de
niebla en un paisaje
principalmente despejado.
Advierte que los logros no serán
gratuitos
y que de un mal trago obtendremos el
jumo del aprendizaje
y la satisfacción del intento.
Cree que es de suma importancia estar
ávidos y atentos,
dispuestos a que un día cualquiera la
felicidad
nos quite la venda...
y nos mire a los ojos hasta
encandilarnos.
Llega,
extiende su mano en un cálido saludo
y nos regala una frase para tatuar en
la memoria,
para recordar en las 8760 horas que
empiezan a correr
sin pausa desdepasad mañana...
p.d esto de estar ardida es un trabajo agotador... más el
optimismo ya forma parte de mi... ja!!!
Besos miles y abrazos infinitos a todos los que amo y me aman...