39... Cumplir años me obliga a repasar lo vivido.
Es un pacto tácito que tenemos, la vida y yo...
El balance de los 38...
Oh por DIOS!!!!
Cavar la tierra intentando descubrir
un tesoro oculto...
Buscar la llave para abrir el baúl y tratar rescatar eso que
alguna vez guarde.
365 días más de vida... 366 porque fue año bisiesto...
8760 horas de pie frente al destino... no 8884 horas porque fue año bisiesto ja!!
8760 horas de pie frente al destino... no 8884 horas porque fue año bisiesto ja!!
Una cana más, una arruga nueva que se dibujó sobre mi ceño, una dermatitis que me esta volviendo loca, algunos parches
sobre una herida que volvió a sangrar, un encuentro familiar, un abrazo
imprescindible que llegó tarde, pero llegó.
Palabras entre amigos, silencios entre amores, fotos que viajaron a la papelera de reciclaje, rencores reseteados, recuerdos impresos en el papel de la eternidad.
Dolores atragantados, lágrimas impotentes, sonrisas renovadas, melodías nuevas, paisajes conocidos, gestos cotidianos.
Un año que se va como el tren, por la vía muerta.
y a partir de hoy un nuevo calendario en blanco dispuesto a ser invadido por la emoción.
Ilusiones renovadas en la tradición del festejo.
Dedos cruzados detrás de la espalda para atraer a la suerte.
Puños cerrados acaparando las promesas.
Pies descalzos en un Febrero frio.
Y la balanza rondando el punto medio entre aciertos y desaciertos, entre encuentros y desencuentros, entre el No y el Si, entre el pasado y lo nuevo.
Una lista enmendada varias veces,
con tachaduras, pendientesy remiendos...
en cursiva, en imprenta, en negrita.
Una lista que se hace bola
para pasar al mundo del olvido...
Palabras entre amigos, silencios entre amores, fotos que viajaron a la papelera de reciclaje, rencores reseteados, recuerdos impresos en el papel de la eternidad.
Dolores atragantados, lágrimas impotentes, sonrisas renovadas, melodías nuevas, paisajes conocidos, gestos cotidianos.
Un año que se va como el tren, por la vía muerta.
y a partir de hoy un nuevo calendario en blanco dispuesto a ser invadido por la emoción.
Ilusiones renovadas en la tradición del festejo.
Dedos cruzados detrás de la espalda para atraer a la suerte.
Puños cerrados acaparando las promesas.
Pies descalzos en un Febrero frio.
Y la balanza rondando el punto medio entre aciertos y desaciertos, entre encuentros y desencuentros, entre el No y el Si, entre el pasado y lo nuevo.
Una lista enmendada varias veces,
con tachaduras, pendientesy remiendos...
en cursiva, en imprenta, en negrita.
Una lista que se hace bola
para pasar al mundo del olvido...
39 años y como si hiciera el balance de fin de año, me detengo a repasar esas cosas que me definen, que me dan identidad y que jamás usaria comocarta de presentación...
a) Soy de lágrima fácil. Puedo llorar
viendo las noticias, escuchando una canción, viendo una pelicula o por
una enorme desilusión, con la misma intensidad.
e) Soy loca maniatíca de la limpieza, tanto que yo misma comienzo a odiarme.
Por supuesto que también tengo cosas buenas...
A) Soy optimista. Sólo me permito
estar mal un tiempito hasta revolcarme, para después volver a apretar el botón "on" del
positivismo y volver a pensar que todo pasa, hasta lo más malo.
B) Soy extremadamente perseverante.
Cuando una idea se me mete en la cabeza pongo todos mis esfuerzos en lograrlo,
aunque deba enfrentarme a millones de NO. En algún momento pienso que llegará
el SI.
D) Trato de justificar hasta las
peores actitudes de la gente. Siempre pienso que un mal comportamiento puede
deberse a alguna patología psiquiatrica, a falta de raciocinio o a negligencia y que en
realidad la persona no tenía intención de hacer lo que hizo o decir lo que
dijo.
Soy consciente de que mi vida lleva años de no
pasar por su mejor momento. Así y todo, el otro día me descubrí pensando,
mientras cocinaba, que de no haber vivido todo lo que viví hoy no
tendría argumentos para escribir se que no lo hago bien pero encontre en la escritura el medio idoneo para exorcisar los fantasmas..., así que agradezco todos
los momentos de miseria, angustia o decepción que me regalaron letras y
sensaciones.
En este recuento, exprimo la memoria y reviso los detalles de mi historia. Me hago preguntas con la esperanza de hallar muchas más respuestas y confirmo muy a mi pesar de que hay cuestiones que aún siguen siendo un espacio en blanco, una hendidura, un pinche agujero en mi espíritu, que intento reparar a menudo sin conseguirlo...
Un poco de esto soy.
Más hay mucho más que quiero ser...